Llama Pack: Turismo alternativo y sostenible en el valle sagrado de los incas

El movimiento turístico en Cusco es intenso. Desde que la ciudad recibió el título de Maravilla Natural de la Humanidad, su flujo de visitante ha crecido sostenidamente.

Durante mucho tiempo, sin embargo, el impacto turístico, en general no llegaba a reflejarse en las comunidades campesinas de alrededores de la urbe. La exclusión, la emigración y dispersión de la actividad económica han sido sus resultados más evidentes y lamentables.

Una de las ideas más interesantes que he visto recientemente para plantear una alternativa turística sostenible es Llama Pack, en el valle de Urubamba, emprendimiento social que integra el desarrollo social comunitario en armonía con el ecosistema. Lo más simpático resulta que las protagonistas del proyecto son llamas.

Desarrollado por Alejandra Arias Stella, directora del proyecto y su esposo Koki Gálvez (ambos se conocieron cuando eran universitarios en Lima), Llama Pack apuntó como una experiencia de turismo vivencial que, además, encontrara en pobladores del valle de Urubamba sus aliados fundamentales.

El proyecto integra a familias del valle, aproximadamente 21 en la actualidad, organizan el Llama Trek, paseo acompañado por llamas, supervisado por un par de comuneros encargados del cuidado y seguridad, a través de la Cordillera del Sur. El circuito total dura cinco días, iniciado en la comunicado de Pumahuanca y concluye en el valle de Lares, cerca de los baños termales del lugar.

Las llamas son un adecuado balance del ecosistema, preservando áreas naturales. Las características del camélido permiten además preservar el camino inca.

En el backpacker de Llama Pack, en el valle de Urubamba, Cusco.

Ademas, Llama Pack está interesado en revalorar las prácticas de crianza y reproducción de llamas. Además, capacitación e implementación de buenas prácticas de entrenamiento y domesticacion, de forma tal que se conviertan en insumo principal del servicio turístico.

Llama Pack fue finalista del premio Kunan el año pasado (cuya convocatoria para el presente año vence este 2 de setiembre), y espera seguir encontrando alianzas privadas y públicas. La meta es que las comunidades se conviertan en administradores integrales del camino.

Bonus track: el Llama Trek que hicimos en un álbum de imágenes de Diario de IQT.